viernes, 7 de octubre de 2011

La pluma





Solo perdí una pluma pensando en todas las cosas,
los nombres amontonados si escribías tenebrosos exámenes de conciencias atormentadas por lo divino.
Páginas y mil maravillas del terror, vida de idiotas, oscuras figuras de asesinos,
que se hacen amar para sentir el dolor de la culpa por almas que parecen lirios…
Dolientes retratos de madres despeinadas de dolor, mujeres caídas, fantasmas, monjes todos reunidos.
La pobreza le daba solemnidad al momento y yo callé ahí mismo, la caravana apura la antigua ruta que camino…
Y el eco resonaba golpeando los tímpanos y el viento arrastraba los  nombres, luego cesó el fuego de aquel torbellino,
al viento la noche lo abrazó en sus sombras y la pluma que se me fue con la lluvia ahora está en tu bolsillo.

La fusa

La fusa en la feria


10 de octubre 2011
san antonio - chile