viernes, 22 de agosto de 2025

Todo color tiene su gris - La fusa










 

Lucrecia, la dama medieval - Todo color tiene su gris - La fusa






I
Cabalgaba la señora,
más veloz que el mismo viento,
y en su capa el movimiento
era un mar que se desflora.
La luna pálida implora,
mas su brillo se somete,
su espada lleva el ardiente
silbido de la serpiente,
y un gato negro vigila,
con los ojos de candila.

II
El corcel, sombra de abismo,
pisaba fuego en la tierra,
como relámpago en guerra
desgarrando el mismo abismo.
Ella, dueña del hechizo,
noche viva, noche entera,
pasa como primavera
de misterio y de negrura,
y su estampa en la espesura
va cantando su bandera.

III
En la alforja va el destino,
en sus labios va el conjuro,
y en el pecho un aire oscuro
late en compás divino.
De los cielos peregrino,
su galope va sellando
un presagio que va alzando,
con estrellas por testigo,
que la muerte va consigo
y la vida va cantando.

IV
Su capa vuela y flamea,
cruz de sombra y de tiniebla,
la campana de la niebla
dobla apenas la marea.
El felino centellea,
y su ronco ronroneo
es un cántico del reo,
del destino que se enciende;
su jinete no se ofende:
ella es juicio y ella es deseo.

V
El acero serpentino
sisea con cada corte,
lleva al demonio de escolte
por camino cristalino.
No hay castillo ni camino
que resista su carrera,
ni alma, ni cruz verdadera
que detenga su destino;
es del cielo un torbellino
y del infierno bandera.

VI
Juglar canta en la taberna,
la leyenda de la dama,
que a la luna deja en llama
y en la noche deja eterna.
Su figura nunca merma,
su galope es la canción,
su silueta, maldición,
y en su espada la serpiente
jura al tiempo y al presente
su reinado de pasión.

La fusa
Agosto/2025